El SES empieza a sustituir máquinas de radioterapia anticuadas, que tratan a 6.400 extremeños
Los nuevos aceleradores son más seguros y precisos según el Servicio de Salud. Permiten aplicar nuevas técnicas en la cabeza, como la radiocirugía para tumores intracraneales, dentro de un comportamiento general que mejora la radiación con mayor intensidad en la zona específica del tumor, y disminuirla en el tejido circundante.
Obsoletas, así están las máquinas de radioterapia de los hospitales públicos de Extremadura, tres aceleradores lineales de electrones de los cuales dos están en Badajoz y uno en Mérida, mientras que la provincia de Cáceres se conforma de momento con uno privado en la capital pero concertado con el Servicio Extremeño de Salud (SES).
Su vida útil es de diez años, pero llevan más funcionando gracias a parcheos y un mantenimiento urgente que no da para más, por lo que se averían con frecuencia.
El consejero de Sanidad y Política Social, José María Vergeles, ha confirmado un plan de sustitución de esos aparatos, por los que pasan anualmente 6.500 extremeños en cuyo tipo de cáncer el tratamiento con radioterapia es más eficaz que la quimio.
El coste de la operación se acerca a los 10 millones de euros a distribuir en tres años, entre 2017 y 2019, ya que en cada ejercicio se renovará uno de los aparatos, para poner en su lugar otro tipo nuevo “de altas prestaciones”, en cada caso la compra de la máquina más la obra de adaptación al lugar está presupuestada en 3,3 millones de euros.
Este primer año se renueva una de las que funcionan en el complejo Infanta Cristina de Badajoz, y el consejero estima que no deben pasar más de 180 días entre la firma del contrato de compra e instalación, y la fecha de funcionamiento; a la vez el SES aborda este año la obra del ‘búnker’ o recinto donde se instalará el futuro aparato en el nuevo hospital de Cáceres.
Mientras se instala este último los pacientes cacereños seguirán atendidos por un concierto con una instalación privada situada en la capital.
En 2018 se sustituye el acelerador lineal de Mérida, y en 2019 el segundo de Badajoz.
Más eficaces y menos dañinos
Los nuevos aceleradores son más seguros y precisos según el Servicio de Salud. Permiten aplicar nuevas técnicas en la cabeza, como la radiocirugía para tumores intracraneales, dentro de un comportamiento general que mejora la radiación con mayor intensidad en la zona específica del tumor, y disminuirla en el tejido circundante.
Anualmente se incorporan a la radioterapia unos 2.475 pacientes nuevos en Extremadura (algo más de la mitad de los cánceres detectados), de manera que en la actualidad son 6.400 los que reciben esas sesiones.
Los pacientes llegan para problemas de cabeza, cuello, mama, pulmón, próstata, vegija…
Radiaciones para curar
La radioterapia es un tratamiento exclusivamente local o loco-regional (cuando se incluyen los ganglios cercanos al tumor), que trata el cáncer en su lugar de origen. Existen dos tipos de radioterapia, la externa y la interna, siendo aplicada la primera de ellas por medio de los aceleradores lineales, unas máquinas que generan y emiten radiaciones para curar gran variedad de cánceres.
Según la Asociación Española Contra el Cáncer (AECC) la radioterapia es el tratamiento que solo o combinado cura a más pacientes después de la cirugía. Más del 70% de los cánceres se tratan con radioterapia con intención curativa y en los tratamientos paliativos es el tratamiento con más coste-eficacia.
Suele durar de media entre dos y siete semanas según la dosis que se administre y el número total de sesiones. Con el objetivo que el tratamiento tenga el mayor beneficio terapéutico, la dosis de radiación se fracciona en un número determinado de sesiones y días, siendo lo más habitual la realización de una sesión al día cinco veces a la semana.
Fuente: www.eldiario.es